El referente del equipo de Pizzi aseguró que "no ganar el campeonato sería una gran decepción", a diez días del duelo decisivo en Liniers. 

"Hablo por mí, no por el grupo. Para mí, no ganar el campeonato sería una gran decepción. Todavía tengo clavada en el pecho la final de la Copa Argentina (perdida ante Arsenal por 3-0 en Catamarca)", señaló Romagnoli en rueda de prensa.

El "Pipi" Romagnoli, uno de los jugadores más experimentados del "Ciclón", admitió que "contra Arsenal (por la Copa Argentina) pensamos que se nos iba a dar y lo perdimos. Este será un partido similar y muy duro. No lo podemos dejar escapar".

"Sabemos que con el empate nos aseguraríamos una hipotética final, pero la idea es salir a buscar el partido. Esta es una final con Vélez, porque ellos también pelean el campeonato, pero estamos mentalizados", añadió el enganche azulgrana.

Romagnoli destacó las ganas de "darle a la gente de San Lorenzo una alegría, porque se lo merece. Hay que dejar la vida, y coronarse. Ojalá se pueda dar, estamos muy enfocados en eso".

De todas formas, el volante de 32 años expresó que "el equipo no habla de festejar o no. Lo hablan los periodistas.

Nosotros no hablamos porque todavía no ganamos nada. En la intimidad te podés imaginar dando la vuelta o todo lo contrario. Pero en el equipo no se habló de festejos".

Por último, Romagnoli afirmó que "me duele perder una final con quien sea. No sé quién armó esa rivalidad con Vélez. De mi parte, y de la de San Lorenzo, la rivalidad con Vélez no existe". (Télam)

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